martes, 21 de febrero de 2012

Reseña: Lost Girl (2010) (Serie de TV)



Canadá se sigue demostrando como un país interesante en cuanto a recientes producciones de fantasía y terror un poco underground para el público en España, como atestiguan nuestras críticas de Todd and the Book of Pure Evil, la saga Dark Rising, Tucker and Dale vs. Evil... En esta entrada reseñaremos una de las series más conocidas de este ámbito, que ha tenido cierto éxito en su país de origen desde su estreno en el 2010: Lost Girl.


¿Qué tenemos entre manos?






En esencia, un mejunje con la típica trama ♫♪ "Somos vampiros, somos licántropos, somos súcubos y hadas somos todos diferentes y estamos muy unidos" ♫♪ (que pusieron de moda Los Fruitis) que sirve de molde a la mayor parte de fantasías urbanas de hoy en día y el ya manido triángulo amoroso "interspecies" que Crepúsculo ha llevado a la cumbre. Por lo que llevo visto de serie, el popurrí de criaturas está mejor fundamentado que la media, dispone de explicaciones argumentales para encajar la realidad de los fae, una raza distinta de la humana (la Seerkind de Weaveworld, las fábulas de Fables, los monstruos de la serie de Grimm... ) que ha alimentado la imaginación de la humanidad durante mucho tiempo. Un nuevo género de criaturas que se subdivide en súcubos, hombres lobo, duendes de fuegos fatuos, el clásico enano, etc, etc...




Una humana y un montón de freaks ¡Fruitis, pioneros, va por vosotros!


Bo es una joven que ha estado viviendo al borde de la sociedad debido a sus poderes que podríamos llamar de seducción y de vampira psíquica (absorbe energía), que en arrebatos de hambre/líbido arrebata la vida de cuantos permanecen en su vida mucho tiempo. Conoce a Kenzi, una camaleónica y un poco alocada humana, a la que mantendrá a su lado y a Dyson, un policía fae un poco soso que acaba revelando su condición de hombre-lobo. Las facciones enfrentadas desde época immemorial de los faes intentan reclutarla para sus filas, pero Bo elige el camino alternativo de ir por libre junto con su amiga Kenzi. A partir de ahí, capítulos procedimentales al estilo Grimm o Supernatural con Bo resolviendo casos de faes díscolos/as que matan gente mientras recoge información de sus orígenes.

 Anna Silk interpreta a Bo, la súcubo protagonista de la serie.

Kenzi, una ladrona humana interpretada por la actriz de origen lituano Ksenia Solo (¡vaya ojazos!) cuyas habilidades se resumen en ser avispada, simpática y hablar ruso con fluidez.

Dyson, un policía hombre lobo interpretado por Kris Holden-Ried (que un año más tarde también sería un hombre lobo en Underworld Awakening ), sigue la tradición del licántropo exhibicionista que luce su torso desnudo por todas partes (a lo Alcide o Jacob). Nada que ver con Silas Weir Mitchell en Grimm.


Una trama a priori interesante (aunque recuerda bastante a Underworld) pero que resulta inane por culpa de unos guionistas un poco pobres, la necesidad de contar toda la situación como si fuéramos tontos en el primer capítulo, sin dejar pie al misterio. Supernatural por ejemplo, con mayor o menor fortuna dejó el arco del misterio principal de la trama para desarrollar hasta la quinta temporada. Peca también de una necesidad excesiva de tratar a los monstruos, que eso es lo que son, de una manera demasiado científica y/o biólogica y no con el embrujo mágico que debería tener. Por supuesto, nos comemos transgresiones del canon con una súcubo a la que quizás le falta rezumar  sexualidad a tiempo completo. En realidad, este cambio es necesario para dar algo de profundidad a la protagonista. Es refrescante la naturalidad con la que se toma el sexo en la serie, así como las diferentes opciones sexuales de los personajes (Bo es bisexual). No es una serie erótica vaya, aunque, para mí, el único tratamiento brillante de un súcubo no erótico ha sido el de Fall-From-Grace en Planescape Torment.

Dicho esto la serie tiene cierto interés. Los personajes tienen más fuerza y son más carismáticos que en series como Grimm o The Dresden Files. Entre otros detalles, resalta no ya que el protagonista principal sea femenino (Bo), sino que su compinche también es una mujer, formando un tándem femenino que hasta puede dar lugar a refrescante subtexto lésbico (tela que la invitación de Bo a Kenzi para entrar en el mundo de lo fantástico sea Do you like milkshake? jejeje) en una relación de amistad muy original. Le faltan tetas y valores de producción para compararse a True Blood, pero tampoco es que las últimas temporadas de la serie de la HBO haya sido descollantes. Es de agradecer que hasta la fecha la relación de Dyson y Bo no parece tan insoportable como el odioso romance entre Sookie y Bill y que la incipiente relación entre Bo y Lauren, la doctora de la serie, pueda hacer de contrapeso.


Como curiosidad reseñar que Emmanuelle Vaugier, actriz que ha salido en un montón de frikadas del estilo que este blog ha presenciado (Smallville, Supernatural, Andromeda, ¡¡House of the Dead 2!!...) tiene un papel como jefa de los faes oscuros, Morrigan.


Aquí la tenéis.


En definitiva Lost Girl es una serie sobrenatural similar en cierto modo a Grimm, The Gates, The Dresden Files, True Blood o Supernatural. que te atrapará en función de si te parecen interesantes las 2 protagonistas en una trama procedimental de fantasía y al potencial triángulo amoroso entre Bo, Lauren y Dyson. No te atraerá desde luego por giros del guión brillantes ni una ambientación fascinante.


Fichas de la película:

6 comentarios:

  1. I never heard of this show but I'd love to check it out.

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  2. Aish. Canadá, Canadá, que te vuelve loco últimamente. ¡Genial review! :D

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    1. Vamos por partes. Sí, Canadá tiene una escena de cine fantástico y de terror que me resulta interesante. A la serie por ahora le doy un 4.5, porque no me llega a generar interés en exceso la trama.

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  3. Está bastante entretenida y me el tema de los Dark y Light Fae me recordó un poco a Changeling, aunque la segunda temporada flojea: se supone que se están enfrentando a nosequé enemigo poderosísimo y se pasan más tiempo resolviendo casos chorras que otra cosa. Anda que...

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    1. Sin cautivarme, de lo que llegué a ver me entretuvieron algo los episodios. Y bueno, estaba a empezando a cerrarse un poco el arco de la primera temporada. Pero me pareció quizás demasiado convencional.

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