Reseña: Creature (1985)

"En el espacio nadie se fijará en que es un muñeco de goma"

El plagio de Alien definitivo. Eso dicen muchos. Bueno, será porque soy nuevo en el negocio este de la serie B, pero a mí Creature me parece más un remake de Terrore Nello Spazio (incluso el uniforme de cuero negro de Bryce recuerda bastante a los trajes que se gastaban en la película de Bava) en el que el alien resulta esta vez sí, ser un engendro copia cutre del original gigeriano de Alien. La demanda por plagio debería ir contra la criatura, no hacia la película. La circunstancia de que toda la acción transcurra en el planeta, con los distintos viajes de los tripulantes de la nave rescatadora a la rescatada y a las ruinas alien, que nunca sabes muy bien en cuál de los lugares están en cada momento enlaza totalmente con la tradición de Terrore Nello Spazio (Planet of the Vampires) más que con Alien. Está considerada como el peor de todos los remakes-copias de Alien, pero a mí simplemente me parece la película más de serie-B del pack (junto con Forbidden World).

Los 7 tripulantes de la nave Shenandoah y un invitado extra: (1) Mike Davison (Stan Ivar), el jefe de la operación; (2) David Perkins (Lyman Ward), el que le discute todo al comandante; (3) la atribulada piloto-mecánica Beth Spaden (Wendy Schaal), siempre con cara de compungida, (4) Jon Fennel (Robert Jaffe) la pareja de Susan, (5) Susan Delambre (Marie Laurie), la presencia  sexual; (6) Melanie Bryce (Diane Salinger), la mujer de acción experta en armas de fuego adicta a los tranquilizantes; (7) la doctora Wendy Oliver (Annette McCarthy) y el bueno de Hans Rudy Hofner (8), interpretado por Klaus Kinski, el único superviviente de la misión alemana.

Las actuaciones oscilan entre lo pétreo y lo marmóleo. Bueno, no. La película tiene como invitado estrella al actor Klaus Kinski, en un papel de superviviente alemán que no creo que el actor teutón conocido por hacer de chupasangres en "Nosferatu: el Vampiro de la Noche" y de conquistador español en "Aguirre la Cólera de Dios" se llegara a tomar nunca muy en serio. Y la verdad es que para ser un actor principal no sale mucho tiempo en pantalla. El resto del reparto, como decimos muy mediocre, y al que el guión no ayuda tampoco a sacar mucho jugo. Da igual, estamos ante un producto de serie B, y esos conceptos como el acartonamiento de los diálogos pierden relevancia a la hora de valorar el largometraje.

El prólogo cuenta cómo fracasó la expedición anterior. ¡Por una foto-tuenti! Nunca aprenderán que el mejor recuerdo siempre será que no haya fotos.

Entrando en detalles de la trama, Creature trata de como una nave de una corporación estadounidense (la Shenandoah) llega a Titán (recuerden, el cuerpo del sistema solar con una atmósfera con condiciones más similares a la de nuestro planeta), detrás de la expedición de otra corporación alemana, que encontró unas ruinas alienigenas de más de 2000 años de antigüedad. Y yo me pregunto cómo lo datarían con tanta precisión. Vamos, ni que usaran el método del carbono-14, diantres,  que tendrían que haber establecido la serie histórica de la concentración de 14C en el satélite de Saturno. Pero bueno, dejemos esta tecnocháchara pseudocientifica, porque criticar a Creature por ello es una tontería, que seguro que podrían usar otros métodos isotópicos de datación cronométrica (que presentarían el mismo problema). El caso es que insisten en que "las cosas" que se encuentran tienen esa antigüedad y hay que creerlo. 

Fijaros en la imagen y atención al detalle: ¡Titán está lleno de telarañas! Ah coño, eso me pasa por meter también el desnudo gratuito en la captura...

Klaus Kinski con su acento alemán nos explica con una preciosa metáfora que encontraron como "la caja de  de mariposas" de un coleccionista, pero que no todas estaban muertas, ni siquiera todas dormidas, sino que había alguna que lo estaba esperando para entrar a matar. Bueno, en definitiva la película va de cómo hay un alien pero que hasta falta de 10 minutos, todo funciona más como en "La Cosa" de Carpenter.

El alien (¿le podemos llamar Titán?) echa también babilla.

Y es que por lo visto la criatura es más versátil que el xenomorfo de Scott: Tiene poderes psíquicos y puede controlar a los vivos y a los muertos implantando una especie de "biological control device" (el punto intermedio entre una larva de Alien y una babosa cerebral de Futurama para entendernos) que posee la voluntad de los tripulantes de la nave y a la postre acaba reemplazando a su cerebro. Con buen criterio, para ocultar en la medida de lo posible lo poco convincente que era el muñeco de goma que ejercía de alien, éste se reserva para los últimos diez minutos de la película.

Te has sonado los mocos un poco a lo bestia, ¿no?

Rodada en 1985, un año antes que Aliens de James Cameron, todavía no aplica la máxima/cliché de "Vasquez debe morir", en el que la mujer guerrera y masculina siempre acaba feneciendo. ¡Y de qué manera lo revierte! De la manera más absurda posible, Bryce, el arquetipo aquí de mujer de acción, lleva desaparecida la mayor parte de la película, y aparece porque sí en la escena final para liquidarse al monstruo alienígena. (- By the way, where were you? - (...) I got lost. JAJAJAJAJAJA) Pues fíjate, eso sí que no me lo esperaba.

Headshot!

La película en determinadas partes es bastante gore, seguramente más que el resto de rivales (salvo quizás Galaxy of Terror). Gratuito y gracioso, para qué nos vamos a engañar. Habiendo visto ya tanto cine de serie B y Z, cuesta ser cruel con Creature. En efecto, no es una remake digno de Alien, pero dudo que con los medios y las pretensiones del director, William Malone, se quisiera perpretar algo demasiado serio. La cinematografía puede parecer bastante caduca para la época (de hecho también recuerda mucho a la de Terrore Nello Spazio, 20 años previa en el tiempo), pero funciona. Oscuridad y humo por todas partes. Como LV-426, vaya. Infravalorada.